El Parque Natural Regional de Aubrac seduce con sus vastas mesetas que parecen el fin del mundo, salpicadas de burones tradicionales y lagos relucientes.
En todas las estaciones, este territorio te invita a escapar: caminataspor los senderos volcánicos, paseos en bicicleta o momentos de tranquilidad cerca de cascadas.
En otoño, no te pierdas el bramido de los ciervos, un fascinante espectáculo natural donde el bosque resuena con este grito salvaje, testigo de una naturaleza aún preservada y vibrante de autenticidad.