Para reservar

Selecciona tus fechas de estancia, introduce el número de personas y reserva tu estancia al mejor precio. Si necesita información adicional, le invitamos a ponerse en contacto con nosotros mediante correo electrónico, teléfono o a través del formulario de contacto. ¡Estamos ansiosos por darle la bienvenida a este pequeño rincón del paraíso!

Reservar Chalet 4 personas
Reservar Chalet 4/6 personas
Reservar Chalet 4 personas
Reservar Chalet 4/6 personas
Para los amantes del aire libre
Actividades

Visitas para toda la familia
Lo esencial de Lozère

Lozère está llena de tesoros que asombran a sus visitantes.

En Mende, se alza orgullosa la catedral de Notre-Dame-et-Saint-Privat, testimonio de la historia local. La Cueva de Dargilan, apodada la Cueva Rosa, revela un espectacular mundo subterráneo. El parque de lobos de Gévaudan ofrece un encuentro inolvidable con estos majestuosos depredadores.

En cuanto a la naturaleza, los lagos de Naussac y Villefort le invitan a relajarse o practicar deportes acuáticos. No te pierdas la Aven Armand, una auténtica catedral subterránea, y la cascada de Runes, impresionante por su belleza.

Por último, el museo arqueológico de Javols profundiza en las raíces galo-romanas de este territorio único.

toma tu turno Pueblos y aldeas

La Lozère descubre maravillas a través de sus ciudades y pueblos emblemáticos. Mende, capital histórica, encanta con sus calles medievales y su catedral. Langogne, situada cerca del lago de Naussac, seduce por su patrimonio y su mercado tradicional. La Garde-Guérin, un pueblo fortificado, ofrece un viaje fuera del tiempo.

Una inmersión en la naturaleza Caminatas

En los alrededores de nuestro pueblo de vacaciones en el corazón de Lozère, no faltan las excursiones. Puedes tomarte un descanso de unos días con nosotros antes de reanudar tu expedición al desierto. Encuentra tu caminata:

Un festín para los ojos y el paladar. gastronomía de lozere

La gastronomía lozeriana refleja la autenticidad y los sabores de su terruño

Quesos excepcionales como el Bleu y el Pélardon hacen las delicias de los amantes. El aligot y la trufa, platos generosos a base de patatas y queso, encarnan la convivencia. Los manouls, una especialidad elaborada con callos de cordero, y el fricandeau, un paté tradicional, ilustran un saber hacer ancestral. 

De postre, la fouace suave o la confitura rascadora de culto, con un delicado sabor a rosa mosqueta, continúan este descubrimiento culinario único.